¿Quién quiere comer sopa caliente durante el verano? Nadie. Pero, ¿y si hacía frío?
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Sirva esta sopa fría en un día caluroso para una comida ligera y refrescante llena de nutrientes.
Combine las cebolletas picadas, el eneldo, los rábanos, el pepino, los huevos y las papas en un tazón mediano. En un recipiente aparte, combine el kéfir y el agua hasta obtener la consistencia deseada, recordando que el resultado final es una sopa, no una ensalada.
Agregue agua al kéfir de leche hasta alcanzar la consistencia deseada.
Vierta la mezcla de kéfir y agua sobre las verduras y sazone al gusto con sal y pimienta.